Despido Disciplinario tras reincorporación de
Incapacidad Temporal
El trabajador llevaba prestando servicios para la empresa demandada desde 2006. Diez años mas tarde, en mayo del 2016 inicia una baja médica que se prolonga hasta noviembre de 2016, fecha en la que el INSS emite una resolución en las que se le deniegan las prestaciones por Incapacidad Permanente.
Inmediatamente después, el trabajador causa una nueva baja que se alarga hasta febrero de 2017. Cuando se emite el alta médica de esta segunda baja, nuestro cliente pide las vacaciones que se le han acumulado durante el periodo de Incapacidad Temporal, siendo estas concedidas de inmediato.
Una vez finalizadas dichas vacaciones, y en el mismo día en el que el trabajador debía de reincorporarse a su puesto, la empresa le hace entrega de la Carta de Despido Disciplinario.
Los motivos en los que el empleador se basa para despedir a nuestro cliente, los califica como faltas muy graves, haciendo hincapié a la transgresión de la buena fe contractual y abuso de confianza en el desempeño de su trabajo.
Al no estar de acuerdo con los motivos alegados en la carta de Despido, por no ser ciertos, se presenta la Papeleta de Conciliación.
Como no se alcanza acuerdo alguno en esta vía previa, se presenta una demanda ante los Juzgados de lo Social de Madrid.
Es en la vía judicial donde se alcanza el acuerdo con la empresa consiguiendo para nuestro cliente una indemnización de 32.000 euros por Despido Improcedente.